QUÉ ESPERAR EN UNA PRIMERA SESIÓN DE OSTEOPATÍA

La teoría dice esto:

La primera cita dura alrededor de una hora, y podríamos dividirla en cuatro partes.

1ª parte: Historia clínica. Consiste en preguntas sobre tu salud general, estilo de vida, antecedentes médicos, síntomas, molestias y lesiones, para poder tener un concepto claro del origen de la patología. También se valorarán las componentes emocionales.

2ª parte: Examen físico. Se centra tanto en las molestias actuales como en un enfoque general, e incluye un análisis de tu postura y de algunos movimientos y la exploración de distintas partes de tu cuerpo. Como muchas veces la zona que origina el problema no es la que manifiesta la molestia, no nos limitaremos a tratar el síntoma, sino que buscaremos la causa.

3ª parte: Tratamiento osteopático. Las técnicas utilizadas son manuales, y tienen como objetivo liberar la tensión de los tejidos blandos, movilizar las cadenas articulares implicadas en la lesión y por último normalizar la disfunción ya sea esta refleja o local.

4ª parte: Asesoramiento. Una vez hecho el diagnóstico acordaremos el tratamiento a seguir, el cual puede incluir varias visitas para terapia manual, ejercicios que podés hacer por tu cuenta (específicos para el paciente y el tipo de dolencia que se presenta) y/o cambios en el estilo de vida. Las indicaciones también pueden incluir en ocasiones asesoramiento acerca de otros tipos de terapia.

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La realidad puede variar un poco. 

Es díficil de explicar lo que hacemos en la sesión, más que nada porque con cada persona es distinto. Incluso distintas sesiones con la misma persona pueden ser muy distintas.

Mucha gente lo asocia a algo así como masajes porque estoy en contacto con tu cuerpo, pero es bastante diferente. En principio, porque hablamos mucho. Te pregunto de tu historia, de tus emociones, tus costumbres, un poco de todo. Y el contacto también es diferente. Es más sutil, pero al ser más sutil llega más profundo. El contacto lo uso para entender cómo funciona tu cuerpo, tus políticas y estrategias corporales, y dónde encuentro resabios de eventos emocionales. Y también para soltar cosas que haya que soltar y desarmar mecanismos de protección que pueden haberte sido útiles alguna vez pero ahora ya no sirven.

Lo que sucede a veces con un evento emocional intenso o duradero es que el cuerpo genera algún mecanismo de protección que queda activo quizás por años. Y ese mecanismo de protección tiene alguna relación con los síntomas que tengas , sea dolor u otra cosa. Yo lo siento en el contacto, y muchas veces me puedo dar cuenta del tipo (si fue algo que te dio bronca o miedo, ponele) y más o menos la antigüedad. Con esos datos te pregunto cosas, si te pasó algo de tal tipo en la adolescencia o algo por el estilo. Y en base a lo que me contestás seguimos buscando, en el cuerpo y en la memoria, y vamos armando una cronología de causalidades y efectos. Muchas veces sucede que por el tipo de contacto y por el lugar en que pongo las manos y a qué plano proyecto el contacto, y porque estamos los dos re enfrascados en tu historia y tu cuerpo, el mismo contacto hace que te acuerdes de algo que no te acordabas, o que relaciones algo que nunca se te había ocurrido. Y a veces, solo a veces, esa conexión profunda con tu sensación de tu cuerpo y el contexto de estar armando tu historia, hacen que entres en una especie de trance de ultra conexión con vos mismx. Si ese trance sucede, pasan muchas cosas.

También puede suceder distinto. A veces viene alguien con un dolor, con la convicción de que es una cuestión emocional, y resulta ser físico.